Resumen del texto: ¿Qué es ser un estudiante en línea?
Ser estudiante en línea implica incorporar el uso de Tecnologías
de la Informática y la Comunicación (TIC), que forman parte de una
transformación socio-histórico-cultural en la que vivimos hoy en día, en la era
de la información que está caracterizada por extender el conocimiento humano a
la velocidad de la luz y a lo largo y ancho del planeta. Es aquí donde las
modalidades educativas se transforman y emerge la modalidad del proceso
educativo que se concibe más como un proceso de aprendizaje que como enseñanza
para las personas que participan en el acto.
El proceso de aprendizaje en línea se lleva cabo a través de un
Ambiente Virtual de Aprendizaje (AVA), el cual es un espacio pensado y diseñado
más allá de los alcances de la formación e información, engloba una visión
conjunta del cómo se enseña pero sobre todo del cómo se aprende y se elabora a
partir del establecimiento de objetivos de aprendizaje, incorporando
actividades y experiencias de aprendizaje estimulantes. Esta modalidad se
distingue por ser un instrumento donde el estudiante aprende de manera
independiente en un entorno educativo.
El rol del estudiante en línea -De ser pasivo a ser proactivo-
El estudiante en línea se distingue porque tiene una actitud de ir
al frente, ya no esperar a que sucedan las cosas o que el profesor le indique
lo que tiene que hacer, se convierte en el actor principal del escenario
educativo, ahora es el responsable de su propio aprendizaje y deberá tomar un
papel activo, de involucrarse en el proceso y prepararse significativamente
para participar en el curso.
De la exigencia en la
participación
La participación es un instrumento esencial que desarrolla el
estudiante en línea frente al estudiante presencial, que la mayor parte del tiempo se mantiene a la
escucha sin la intención de hacer una intervención (previendo pasar
inadvertido). En cambio, la modalidad en línea ofrece recursos tecnológicos que
generan registros para que el docente o la figura académica correspondiente
identifique si el estudiante participa o no, lo cual puede promover un
desarrollo significativo de el sentido de la autocrítica del estudiante en la
dinámica grupal.
De la estática entre tiempo y espacio a la dinámica autogestiva
El estudiante en línea no está sujeto a horarios y/o espacios
físicos para dar paso a la autogestión; él mismo es quien determina dónde, cómo,
cuándo, y cuánto estudia, imprimiéndole el papel protagónico en su proceso de
aprendizaje. Esta modalidad permite a cualquier estudiante, independientemente
de sus ocupaciones, se incorpore a un programa educativo. Es así que cualquier
persona con acceso a internet puede estudiar en línea en cualquier lugar y en
cualquier momento. Sin embargo, la flexibilidad no implica que no haya tiempos
de entrega, por lo que es muy importante que el estudiante se administre a fin
de cumplir cabalmente con sus actividades académicas.
Del seguimiento académico
En el sistema presencial, cuando un estudiante tiene una duda o
inquietud, no siempre la externa al profesor, debido al miedo que implica que
lo tachen de retrasado o ingenuo; en contraparte, el estudiante en línea tiene la
facilidad de compartir sus dudas en público (mediante foro de discusión) así
como en privado (mensajería interna, correo electrónico), para ambos casos
deberá ser paciente y esperar la respuesta del Docente entre las próximas 24 y
48 horas y visitar la sección de preguntas frecuentes.
De la interacción grupal y con el docente
A diferencia de recibir explicaciones e
indicaciones verbales de parte del docente, el alumno en línea interactúa
principalmente con los contenidos (multimedia, interactivos, entre otros) en un
ambiente virtual de aprendizaje que si bien son una base de conocimientos de la
que se parte en un curso, únicamente representan un recurso para desarrollar y
potenciar el aprendizaje, por lo que no lo determinan por completo. Asimismo, el
estudiante en línea interactúa de manera asincrónica con el docente en línea
(al cual también puede denominarse Asesor, Tutor, Guía, entre otros), así como
sus compañeros de curso. Cabe señalar que cada estudiante, aunado a que puede
interactuar con sus pares y docente, no necesariamente tiene que ir al ritmo de
sus compañeros, sino que cada uno lo hace acorde a sus posibilidades y
disposición de tiempo y circunstancias.